Encuentro de Teatro Playback: La espontaneidad de una escena

Del 22 al 27 de enero, en saludo al aniversario 34 del colectivo Teatro de los Elementos, como parte de la jornada Villanueva y en homenaje al Apóstol, acontecerá la duodécima edición del encuentro de Teatro Playback.

La especialidad artística es un ejercicio de organicidad que revela auténticos sentimientos que el intérprete toma prestado de un texto o una composición dramática, elaborado previamente por algún autor. Es el actor un artista obligado a crear en momento muy preciso y en diversas circunstancias. Más que esperar la llegada de la inspiración, está impuesto a forzar dicha iluminación a los momentos pactados de puesta en escena. Este es un arte que demanda de meses de ensayos para modular una hora de representación.

Partiendo del precepto de que el actor tarda meses en convertir lo incierto en verdad, o de apropiarse de la realidad de la composición dramática, mucho más difícil resulta elaborar, perfeccionar y mostrar el producto histriónico delante de los espectadores y atendiendo a situaciones propuestas por los propios auditorios. En eso consiste el teatro playback, una representación performática basada en la improvisación. Su dramaturgia se compone al instante de su ejecución y con el consenso colectivo de las interpretaciones individuales de los ejecutores. Sobre esta estructura se construye la representación sin que medie, entre los actores, un plan previo para su ejecución.

Partiendo de la complicidad espectador-actor, el primero aporta los posibles argumentos, situaciones y conflictos que le dan forma a la historia; el segundo, proyecta acciones, expresiones, gestos, sonidos y palabras a la fábula. Como resultado de la combinación de ambos procesos brotarán los sentimientos y las afectividades que redefinirán la confabulación entre los públicos y los intérpretes. En un teatro convencional, que se realice de forma tradicional intervienen el dramaturgo, el director, los diseñadores y todo el personal o técnico que demanda el aparataje de los escenarios de representación. En esta manera de hacer el canal de comunicación es inmediato: espectador-actor, y viceversa.

El primer paso al éxito de la representación está en el grado de confianza que los intérpretes logren establecer con los públicos. Por ahí comienza la acción dirigida a instituir y avivar todos los puntos de contactos entre ambos; a descubrir canales subterráneos de la comunicación, los puntos de empatía y a generar mucha familiaridad. En tales propósitos interviene todo el personal artístico: actores, músicos y el guía. Casi siempre se trabaja con músicos que ejecutan algún instrumento o con otros capaces de generar una sonoridad adecuada a la representación. La puesta no va encaminada a un diálogo sostenido entre los actores con extensos parlamentos, sino al uso de frases o palabras sueltas que  pueden ser sustituidas por sonido.

Dentro de los roles artísticos que faciliten la representación el conductor, es un eslabón esencial, el cual sirve de moderador de la comunicación, o sencillamente como maestro de ceremonia, que guía la ejecución antes los ojos de los espectadores. Él hace énfasis en detalles para plasmar sobre la escena los sentimientos deseados o ajustar las propuestas individuales en una unidad colectiva.

El conductor  es un estimulador de la acción. Procura mayor información y procesos de pensamientos que desde la lógica impulsen, en plasticidad, belleza e impacto, los enunciados y discursos emitidos. También dentro de elenco artístico y de la propia producción de mensajes se destaca el guía, el cual toma protagonismo en las propuestas tratando de unidireccional las entregas artísticas en el mismo instante de producirse.

En la medida que un actor se entrena en este arte y se desarrolle puede llegar a conquistar la categoría de conductor y, por último, instituirse como entrenador. Para prever el auge de los artistas y las agrupaciones que se dedican a esta manera de hacer el arte escénico existe una red internacional de playback y un centro internacional radicado en los Estados Unidos. Si el último se encarga de la preparación y la capacitación, la primera se ocupa de los eventos y conferencias. Por suerte para Cuba teatro de Los Elementos es miembro activo de ambas instituciones y las dos avalan el evento que acoge la ciudad sobre ese estilo.

Este certamen tiene características que lo defienden en las dos direcciones posibles: taller, porque genera el intercambio de ideas entre sus miembros, y por ende la superación de los mismos; y certamen, pues se fundamenta sobre la base de una programación y de un número de actividades en diversos espacios para los públicos. Todo esto ha garantizado que llegue de forma ininterrumpida a su edición número 12. Muchas son las solicitudes de diversos países y de gran variedad de artistas por participar; lo que le permite sobresalir a planos internacionales.

Playback, el arte de traducir in situ los sentimientos de los públicos en representación gana muchos matices cuando median las idiosincrasias, las culturas y los idiomas de varias naciones. Como siempre se logra el equilibrio entre locales y foráneos igualando su número de participantes. Harán presencia artistas de Siria, Alemania, Bulgaria, Estados Unidos y China, un total de diez extranjeros y diez cubanos.
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