La Casa de las Américas está viviendo el año 65 de su fundación y en su colectivo destacan la permanencia y el compromiso como valores compartidos.
Rosa Marina González le ha dedicado décadas de su vida a esta institución cubana y latinoamericana, y con ella -quien ahora se desempeña como Directora de la Biblioteca de la entidad-, dialogamos.
“… llegué hace 38 años, proveniente del sector educacional y esta ha sido mi gran escuela, donde me formé como bibliotecaria y he transitado por todas las áreas del saber en esta especialidad.
A la Casa le debo el conocimiento que tengo de las artes, la literatura y las ciencias sociales de los países de América Latina y el Caribe…”, comentó
No sólo el área profesional ha estado marcada por la impronta de Rosita (como se le conoce), también las organizaciones políticas y de sindicales de Casa de las Américas han contado con sus saberes y experiencias, lo que ha incidido de manera positiva en su personalidad.
“… el haber asumido responsabilidades en las organizaciones me ha aportado mucho en lo personal, ganando en conocimientos, en experiencias y en la práctica laboral…”, puntualizó.
Rosita fue una de las personas más cercanas al poeta Roberto Fernández Retamar, quien fuera presidente de la institución durante décadas.
“… Roberto fue como un padre para mí, a su lado aprendí desde a escribir correctamente hasta a comunicarme con las personas.
Su presencia en mi vida es muy importante, su apoyo fue incondicional y su ejemplo es mi paradigma de dignidad, respeto, compromiso y responsabilidad”.
La institución que fundara Haydeé Santamaría hace 65 años ha crecido mucho y expandido sus horizontes, en ese sentido la entrevistada comentó:
“… como dijera Haydeé el propósito de la Casa siempre ha sido crecer y ese ha sido de nuestros objetivos fundamentales, por lo que en estas más de seis décadas hemos abierto nuevos caminos al arte y la literatura del mundo, y sus incidencias en las ciencias sociales.
En la etapa más actual hemos abierto las puertas a la comunidad, llevando nuestro trabajo a centros educacionales donde se forman niños con necesidades especiales y a otros de la enseñanza general.
La Biblioteca ha sido pionera en este accionar comunitario con el Taller “Crear para aprender, moviendo la inclusión”, que desde 2015 ha logrado involucrar al unísono a niños con necesidades especiales y niños de la comunidad… “.
El mencionado Taller ha recibido reconocimientos internacionales de entre los que destaca el Buenas Prácticas.
El principal aporte de esta acción se evidencia en la manera en que se han sumado los demás departamentos de la entidad: música, teatro, y artes visuales, todos con el propósito de contribuir con el desarrollo intelectual y la inclusión social de los infantes participantes, sus maestros y familiares.
“… gracias a las alianzas entre todos hemos invitado a agrupaciones escénicas y musicales, al tiempo que les hemos impartido talleres en los que han adquirido habilidades que les pueden ser muy útiles en sus vidas futuras como es la construcción de instrumentos musicales o hacer un libro con sus propias manos…”, apuntó Rosita.
Autora: DIGNA ROSA PÉREZ MOREJÓN