Rosa Campo obtiene premio Maestra de Juventudes

En ocasión del aniversario 34 de su fundación, el 18 de octubre venidero, la Asociación Hermanos Saíz (AHS) dio a conocer hoy los nombres de las siete nuevas personalidades de la cultura cubana que ha reconocido con su prestigiosa distinción Maestros de Juventudes.

Los músicos Rosa Campo y José Antonio Méndez Valencia, la directora de programas, Caridad Martínez González, la escritora Basilia Papastamatíu, el historiador e investigador Pedro Pablo Rodríguez, el pintor, grabador y escultor Eduardo Roca «Choco»; y el actor y crítico Roberto Gacio Suárez, fueron los elegidos en este 2020.

En su Portal del Arte Joven Cubano, la organización que agrupa a la novel vanguardia intelectual y artística del país reconoció a estos notables intelectuales, a quienes considera importantes referentes.

Sobre la labor de los Premios Nacionales de sus respectivas manifestaciones: Caridad Martínez en la Radio, Pedro Pablo Rodríguez en Ciencias Sociales y Humanísticas e Investigación Cultural y Choco en las Artes Plásticas, la AHS manifiesta que expresa un compromiso total para con la sociedad y especialmente con los más jóvenes.

Reconocida recientemente con el Premio de Periodismo Cultural José Antonio Fernández de Castro, hace mucho tiempo que la Papastamatíu dejó de ser considerada una destacada poetisa y traductora argentina para ser abrazada como una de las nuestras, resalta el escrito.

Asimismo, refiere que nadie duda que las canciones de Rosa Campo conforman, definitivamente, la banda sonora insular de la infancia; mientras que Méndez Valencia ha sido señalado en muchas ocasiones con amor y gratitud por músicos que deben su carrera a sus extraordinarias enseñanzas e invariable consagración.

Por otra parte, destaca el meritorio trabajo de Gacio Suárez, quien fundó junto a Jackeline Mepiel los Premios Llauradó de la AHS, y es tomado como el albacea de la historia del teatro cubano de los últimos 60 años.

Afirmaba Martí que la mayor gloria de un maestro es hablar por boca de sus discípulos. Hoy son justo sus alumnos quienes reverencian, agradecidos, a sus magníficos paradigmas, publicó la AHS.

La organización juvenil resaltó que entrega este, su máximo reconocimiento, a personalidades que hayan hecho del magisterio una acción sostenida, «por establecer de manera perenne con las nuevas generaciones, un diálogo abierto; y por entregar a su pueblo una obra contundente y sincera, siempre comprometida con la belleza». (ACN)

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