El 15 de junio de 1958, en La Habana fueron asesinadas, con métodos horrendos, dos jóvenes revolucionarias. Se nombraban Cristina Alicia y María de Lourdes Giralt y pertenecían al Movimiento de Resistencia Cívica del “26 de Julio”. Las hermanas habían nacido en la ciudad de Cienfuegos, en una casa marcada con el número 3709, en la avenida 42, entre 37 y 39.
Faure Chomón, tiempo después, expresó sobre el suceso: “las mataron de noche, parapetados en la oscuridad porque tenían poderes, eran delincuentes enemigos del pueblo y tenían que esconderse. Después escribieron una crónica mentirosa (…) informaron un combate que nunca hubo”.
Luego del triunfo del 1ro. de enero, y en homenaje a las Giralt, la vivienda (de corte ecléctico, construida a principios del siglo XIX) se convirtió en museo el 16 de noviembre de 1984. Siete años después, el Museo de Clandestinidad fue declarado Monumento Local.
El inmueble atesora gran número de objetos y documentos relacionados con la lucha clandestina, guerrillera, en el exilio y sobre la vida de las hermanas Giralt. Cuenta con cinco salas, tres relacionadas directamente con la vida de las hermanas, una dedicada al Movimiento 26-7 y una última que es itinerante.
Una vez al mes, el museo brinda su espacio para la realización de varias peñas, entre ellas la infantil “Dame la mano” y la dedicada a la Tercera Edad, “Súper Abuelo”. Organizan muestras circulantes en fechas alegóricas, patrocinan concursos relacionados con los más diversos temas: “Mi personaje favorito de la Edad de Oro”, “Comidas canarias y criollas” y “Siempre presente”, dedicado a las Hermanas Giralt.
Sin embargo, el estado de conservación adolece, y está lejos de encontrarse entre los rangos permisibles. Casi la totalidad de las paredes tienen la pintura roída, básicamente por cuestiones de humedad. La lejana fecha en que fue objeto de restauración, atenta de igual forma contra la conservación de cada uno de los elementos de importancia histórica que allí se atesoran; y no hay noticias cercanas sobre posibles reparaciones.
Elemento a tenerse en cuenta si se apunta que la ciudad de Cienfuegos cuenta con solo un museo, además de este, que esté dedicado a un segmento de la lucha en el país. El de la Clandestinidad pide a gritos una mano que lo salve de perecer entre las fauces del tiempo.(Tomado de Cinco de Septiembre)
Deja una respuesta