Por: Pepe Sánchez y Orlando V. Pérez.
31 de marzo de 2011.
Con notable éxito transcurrió la Miniferia del Libro en Cumanayagua, en el día de ayer miércoles 30 de marzo de 2011. Se ofertaron 852 títulos de autores cubanos y del ámbito internacional, para un total de 9 350 ejemplares a la venta, de los cuales fueron vendidos 2 640, que representa alrededor del 25% de las ofertas. Ello reportó una ganancia de 5 882 pesos cubanos.
Tal vez, las cifras frías no reflejen cabalmente el impacto favorable que tuvo la Miniferia en un municipio como Cumanayagua, pero el hecho mismo de ese caudal de ofertas y de ventas, de por sí, si se analiza detenidamente, refleja el amor que siente el ciudadano común de nuestra localidad por el libro.
La Miniferia fue apoyada por diferentes acciones literario-culturales, y la presencia de diferentes personalidades cumanayagüenses del mundo de las letras, entre ellas, Pepe Sánchez, Orlando V. Pérez Cabrera, Magaly Ojeda y Rodolfo Alemán. En horas de la tarde se desarrolló el ya tradicional Bombo Literario, a cargo de los dos primeros escritores mencionados, en el portal de la Librería “Antón Makarenko”.
Allí, los transeúntes que se llegaban, mientras manoseaban y adquirían libros a la venta, se convertían a la vez en partícipes para las respuestas a las preguntas literarias acerca de la vida y obra de autores de la literatura universal, cubana y de la localidad. Muy alentador fue el hecho de que la casi totalidad de las preguntas fueron respondidas por adolescentes vestidos con su uniforme de Secundaria Básica, en un ambiente cordial, y festivo, cuyo principal protagonista era el libro.
En horas de la noche, se realizó una ronda de lecturas en una de las dependencias de la recién inaugurada Biblioteca Municipal “Tania la Guerrillera”. Pepe Sánchez tuvo a su cargo hacer el exordio de los creadores invitados a la lectura; mientras, Magaly y Orlando Víctor hacían lectura de sus poemas más recientes, incluidos en libros ya publicados. Este encuentro lo cerró magistralmente Rodolfo, con lectura de textos de narrativa y de poesía, en los que se apreciaba un sentido crítico de la realidad que vivimos en el día a día, con un lenguaje que, sin apartarse de los códigos tradicionales de la literatura, servía de catalizador de aspectos muy puntuales.
Bienvenidas estas miniferias, a la vez que los escritores cumanayagüenses aspiran a retomar ser sede de la próxima Feria Internacional del Libro, para lo cual Cumanayagua siempre ha demostrado tener suficiente potencial creador y razones organizativas y culturales.
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