Acércate a mi ciudad: proyecto cultural de la Oficina del Conservador de Cienfuegos

La inclusión del Centro Histórico Urbano (CHU) de Cienfuegos en la Lista del Patrimonio Mundial desde 2005, ha supuesto un cambio sustancial en los modos de interacción socioeconómica y cultural de los diferentes grupos poblacionales asentado en las inmediaciones del área declarada.

Regulaciones urbanísticas y arquitectónicas, en cuanto al número de visitantes nacionales y extranjeros, la refuncionalización de algunos inmuebles y la peatonalización de una de las principales arterias de este espacio citadino; emergen como condicionantes. De ahí la necesidad de crear una entidad mediadora en el proceso de adaptación a la nueva realidad de la ciudad histórica en la que vivimos y de la que se esperan favorables condiciones futuras.

 

Nace entonces en diciembre de 2007 la Oficina del Conservador de la ciudad, institución consultora de organismos y población en general en cuanto a estrategias de manejo, restauración y conservación del CHU, así como de las 70 manzanas que se extienden hasta la zona de protección del reparto Punta Gorda.

La estrategia comunicativa de la Oficina involucra en mayor o menor medida a la totalidad de las áreas de trabajo que estructuran su sistema y vincula en su ejercicio a una buena parte de su recurso humano.

Diversos canales y soportes amparan la producción informativa de la institución que tiene como emisor matriz el área de Gestión, Promoción y Relaciones Públicas, desde donde se diseña la plataforma programática de comunicación externa de la sede.

Acércate a mi ciudad, constituye el proyecto rector de la labor comunitaria y socializadora de la Oficina. Esta iniciativa se ha consolidado y sostenido más certeramente desde el año 2012, a partir de la implementación de disímiles proyectos con los que la comunidad ya se identifica.

Este programa comprende actividades sistemáticas como la peña Trovada a la Perla, que se celebra el último viernes de cada mes en alguno de los inmuebles patrimoniales de la ciudad, e invita a diferentes investigadores, autores, profesores, personalidades de la cultura vinculadas al Patrimonio.

Un espacio para la proyección de audiovisuales vinculados a la temática patrimonial e histórica también se insertan en la iniciativa, además de un plan anual de exposiciones de creadores de la plástica, locales y nacionales en la sede principal de la Oficina. Este año han participado el fotógrafo César Arias con la muestra Temática libre, un colectivo de autores de la sociedad gráfica de Cienfuegos a propósito de la Feria de la Estampa. Durante el verano el creador Adrián Rumbaut inaugurará una exposición personal de técnica mixta, ganadora de la pasada Bienal de La Habana.

El plato fuerte de Acércate a mi ciudad es la reanimación del Boulevard San Fernando y el corredor Santa Isabel que tiene como premisa la promoción de artistas locales. Contempodans, el grupo Guiñol, Abracadabra, taller de La Colmenita en Cienfuegos, la compañía de baile flamenco de Yoel Zamora, el Paseo de esculturas vivientes y el Carro de Thespis, son los grupos que cubren con sus propuestas culturales todos los días de la semana, con un diseño además para las diferentes generaciones de públicos.

Diferentes eventos de carácter científico también tienen cabida cada año en Cienfuegos organizadas por las especialistas del proyecto Acércate a mi ciudad, bajo la dirección de Ileana Ferriol y el Conservador de la ciudad Irán Millán. Cada año sesiona el Encuentro ciudades patrimoniales y el Taller Cultura e Identidad.

Acerca también la ciudad a los cienfuegueros Radio Fernandina, una emisora comunitaria con alcance de trasmisión en el boulevard San Fernando y que tiene como referencia la experiencia pionera de Habana radio, de la Oficina del Historiador de La Habana. La Revista Desde el Boulevard, ofrece a los peatones mensajes de bien público y opciones culturales de las instituciones insertadas en el centro histórico.

El próximo cinco de julio los cienfuegueros celebrarán el octavo aniversario de la declaratoria de su CHU, como Patrimonio Cultural de la Humanidad, por sus valores excepcionales entre las ciudades fundadas en el siglo diecinueve. Satisfacción que a decir del historiador Eusebio Leal, hace orgulloso a quienes aquí vivimos.

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