El teatro Tomás Terry, junto al teatro Sauto de Matanzas y el teatro La Caridad de Villa Clara, conforman la trilogía de teatros del siglo XIX del país, que aún brindan funciones al público.
En los cayos de la bahía de bolsa de Cienfuegos, desde 1540, se establecieron piratas y corsarios, como Jacques de Sores, Francis Drake, John Morgan, Guillermo Bruce, Lorenzo Craff, Jean el Temerario y Gilberto Girón.
El escritor norteamericano Samuel Hazard, autor del libro “Cuba a pluma y lápiz”, visitó Cienfuegos durante la segunda mitad del s. XIX y se hospedó en el Hotel La Unión de esta ciudad.
A partir de una vieja majagua (árbol endémico), el alférez Félix Bouyón Turner trazó la primera manzana de la población de Cienfuegos, que continuó creciendo con semejante trazado recto.
En 1915 fue huésped del Hotel la Unión, de Cienfuegos, la afamada bailarina rusa Ana Pávlova, quien interpretó el ballet clásico “El lago de los cisnes” en el teatro Luisa de esta ciudad.
Cienfuegos fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad el 15 de julio del 2005, es la única ciudad fundada en Ibero América por franceses en el siglo XIX, bajo la corona española.